Descripción
En 1468, Jaime II Lusignan llegó al trono de Chipre y se casó con Catalina Cornaro, nobre veneciana, lo que fue bien visto por los venecianos que ansiaban controlar Chipre por mucho tiempo.
Jaime II murió poco tiempo después, y Catalina embarazada actuó como regente, pero su hijo Jaime, falleció antes de su primer cumpleaños de malaria y Catalina se convirtió en Reina. El Reino de Chipre en declive era tributario de los mamelucos de Egipto desde 1426, pero con Catalina en el poder desde 1474 hasta 1489, el reino estuvo realmente controlado por Venecia. En ese año, Catalina se vio forzada a vender el Reino a la República de Venecia.
Los otomanos atacarían Chipre de forma continua a partir de este momento y los venecianos trajeron a los mejores arquitectos militares de Europa para fortificar las principales ciudades de la isla. La nueva fortaleza de Nicosia de 1567 era una estrella con once bastiones, bien preparada para la artilleria. En Famagusta se construyeron grandes iglesias para mostrar las riqueza de los mercaderes.
En 1570 los otomanos atacaron de nuevo, pero no con un nuevo ataque de pillaje, sino un ataque a gran escala con la participación de 60.000 soldados que desembarcaron cerca de Limassol y comenzaron el asedio de Nicosia que cayó en 2 meses. La importante fortaleza de Nicosia no había sido concluida y no pudo hacer frente al asedio. Sin embargo Famagusta si estaba lista y su asedio duró un año, en el que la santa liga tuvo tiempo de montar una flota para socorrer a la isla, pero para entonces la situación en la ciudad era ya insostenible y Marantonio Bragadin negoció la rendición en unos terminos que los otomanos no cumplieron.
Los otomanos se habían desgastado mucho en el ataque, y cuando la flota preparada por la Santa Liga llegó, no pudieron hacerle frente perdiendo en Lepanto la famosa batalla.
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